LOS PRIMEROS CONVENTOS Y ÓRDENES MILITARES EN LA NABARRA OCCIDENTAL

 

LOS PRIMEROS CONVENTOS Y ÓRDENES MILITARES EN LA NABARRA OCCIDENTAL

Aitzol Altuna Enzunza

Convento femenino de San Juan de Acre en Salinas de Añana, con varias cruces de Malta en los arcos


Las primeras iglesias importantes de la Nabarra Occidental, tienen como patronos o fundadores los señores y las damas más pudientes de cada comarca, y no la Iglesia Católica, tal y como comentamos en el artículo https://lehoinabarra.blogspot.com/2021/03/las-inmatriculaciones-y-la-propiedad-de.html.


Entre los siglos XI y XII, hay pocas referencias a monasterios o conventos en la Nabarra Occidental, siglos donde se terminó de cristianizar la vertiente cantábrica. Su escasez, ha perjudicado la información que tenemos sobre esos siglos, al ser los monasterios los centros de cultura y escritura de la Edad Media. 



Dentro de esos siglos, donde los baskones habíamos consolidado el reino de Nabarra, sabemos al menos de la creación de un monasterio-convento en San Sebastián del Antiguo en el valle y tenencia de Hernani, hoy un barrio junto a la playa de Ondarreta en Donostia-San Sebastián.


Para más información sobre el monasterio de San Sebastián en el Antiguo: https://lehoinabarra.blogspot.com/2021/02/la-villa-nabarra-de-san-sebastian.html

Para más información sobre la cristianización de Bizkaia se puede leer: https://lehoinabarra.blogspot.com/2018/10/nabarra-cristianizo-bizkaia.html.


Al parecer, se intentó fundar un monasterio premostratense en San Juan de Gaztelugatxe en el siglo XII (Bermeo, Bizkaia), similar al influyente de San Salvador de Urdax en el pirineo nabarro y dependiente del superior de la Orden en Gascuña, pero que fracasó. Esta Orden fue fundada por el alemán San Norberto en 1126 y se extendió por el norte de Francia y el sur pirenaico.




SIGLO XIII


Tras la conquista de la Nabarra Occidental por el reino de Castilla, parece que surgieron aún más dificultades para la instalación de monasterios, en su sentido de conventos de las diferentes Órdenes Religiosas de la Iglesia Católica, tal y como estaba ocurriendo en la propia Castilla o en todos los reinos europeos. 


Convento San Francisco de Vitoria, entre la calle San Francisco y Postas, derribado en 1930
https://www.gasteizhoy.com/convento-san-francisco-vitoria/


Según Ernesto García Fernández en su trabajo "Dominicos y Franciscanos en el País Vasco", en el siglo XIII, en toda la Nabarra Occidental, únicamente se fundaron dos conventos masculinos, uno de franciscanos y otro de dominicos, ambos en Vitoria-Gasteiz, el de San Francisco y el de Santo Domingo, gracias a ser la principal villa de la Nabarra Occidental con unos fueros regios que lo permitían. En los pórticos de San Francisco, se celebraban las reuniones vecinales de Vitoria en los siglos XIV y XV. 


Grabado de 1824. Fuente de los patos del siglo XVI en la plazuela del desaparecido monasterio de Santo Domingo. Su fundación según la tradición, fue por el propio Domingo de Guzmán, fundador de la Orden de los Predicantes. Sancho VII el Fuerte de Nabarra, donó  al santo para su construcción los palacios, la casa fuerte y la ermita contigua de Santa Lucía que poseía en Vitoria-Gasteiz, por tanto, a finales del siglo XII, pero la obra se finalizó a partir de1235 con el primer prior Pedro Ochoa, siendo Pedro Yeneguez el segundo. Dos incendios destruyeron el archivo del convento en 1240 y 1427.


La falsa fecha de la fundación del monasterio de Burtzeña (Barakaldo):

A finales del siglo XIII, la zona comarca del río Cadagua en las Enkartaciones bizkaínas, estaba controlada por los Salcedo de la casa de Ayala que fue una de las pobladoras del valle. Según relata E. Labayru en su "Historia de Bizcaya" (1900): "En unos terrenos cerca del mar y junto también a la desembocadura del Cadagua en el Nervión o ría de Bilbao a Portugalete. Su dueño era el conde Fernán Pérez de Ayala, el cual tenía edificadas las conocidas torres de Luchana, y próxima a ellas había construido una iglesia de dedicada a la Santísima Virgen”. 

Aunque, realmente, todavía la comarca no estaba totalmente integrada en el señorío de Bizkaia (donde se integró plenamente en 1366) y no pertenecía al Obispado de Calahorra, lo que seguramente posibilitó su creación, sin embargo, desde 1229, Barakaldo pasó a la diócesis de Calahorra-La Calzada https://lehoinabarra.blogspot.com/2020/04/hasta-donde-llego-la-diocesis-nabarra.html

Monasterio de las mercedarias de Burtzeña (Barakaldo)

En la entrega del territorio a la congregación, aparece nombrado: “Con la iglesia dio a los religiosos de la Merced la torre y casa que también había edificado en Burceña, desde la casa de Sancho Perez de Tapia fasta la casa de Juan Cruz de Burceña (el merino y alcaide de sus torres de Luchana); y desde “el esquinal de la casa de Pedro Urtiz de Unsáa, mi mayordomo fasta la mar derecha abajo por e l camino real que biene de Balmaseda a Portugalete fasta el regato encañado nombrado Mespelerreca derecho abajo, fasta la mar salada e rio suso declarado (el Cadagua) que pasa por delante de la mi Eglessia de Santa Maria de Borceña (sic.)  las mis torres de I.uchana”, Y esta es la primera comunidad de religiosos que consta con certeza que se fundó en el Señorío de Bizcaya; porque la donación verincada en 1162 por D. Lope Diaz [el de Najara) de S. Juan de Castel-Ugach a los benedictinos o premonsiracenscs de Santa María de la Vid, no consta de un modo fehacienteque se llegase a establecer y que prosperase”. 

En una copia de la escritura fundacional de Burtzeña, en el año 1709, el catedrático de Alcalá y franciscano Domingo de Zavala, lo situó en 1284. Pero este documento tiene anacronismos, por lo que se retrasa justo un siglo su fundación a 1384: 

"Sin embargo, todo parece indicar que el documento no se redactó en 1284. El escritor mercedario Guillermo Vázquez llegó a la conclusión de que los Ayala del texto concordaban con la genealogía de esta familia en la segunda mitad del siglo XIV (no con la del siglo XIII como se indica en el documento), por lo que debía retrasarse un siglo la fundación. Este extremo parecía quedar confirmado con un documento que conservaban los frailes que indica que la donación al monasterio se produjo en 1384 -“de lo que hubo fecho donación al dicho monasterio con otras cosas el conde Hernán Pérez de Ayala ante Juan Urtiz de Unsana escribano a quatro de mayo de mill e trescientos e ochenta e quatro años”-, exhibido por fray Miguel de Alonsotegui en 1569 a las autoridades y testigos presentes para avalar la propiedad de un arbolar que había delante de la puerta de su iglesia" (toda la información en: https://ezagutubarakaldo.barakaldo.eus/articulos/el-monasterio-de-burcen%CC%83a-origenes-fundacion-y-desarrollo/).

Tras la muerte de Juan Sánchez de Salcedo, señor de las casas de Ayala y Salcedo en las Enkartaciones (en Güeñes, hacía donde se había desplazado la familia), acaecida hacia el año 1332, y a falta de descendientes varones, se disputó la herencia de este poderoso linaje entre las facciones ganboina y oñacina, representadas respectivamente por los Murga (bastardos de los Ayala) y los Ayala de Toledo, resultando victoriosa esta última, de cuyo bando eran dependientes todas las casas y solares de Somorrostro. El poder de los Ayala se manifestó especialmente en el valle de Barakaldo, en el que dispusieron de casas censuarias, torres, ferrerías y monasterios. En especial, el monasterio de Burtzeña y las torres o castillo de Lutxana (Goio Bañales "El mundo naval de las Encartaciones").

En Gipuzkoa y Bizkaia, no se fundaron más conventos masculinos en ese siglo.

Vista de Lutxana por Luis Paret (1785) con las torres de Lutxana
Torre de Lutxana de los Ayala en Barakaldo, su primera mención escrita es de 1384 cuando eran de Fernán Pérez de Ayala, señor de este valle. Según Adrián Celaya en su libro sobre el origen de Bizkaia, el señor de Ayala, desde su torre de Lutxana, fundó en Burtzeña, el primer monasterio de Bizkaia en el año 1284, de la orden de la Merced (donde hoy se alza la iglesia se hallaron 47 tumbas y los restos del monasterio).

Conventos femeninos:


Tampoco son mucho más los conventos femeninos del siglo XIII. En la villa gasteiztarra, el convento de monjas de Santa Clara o clarisas. Otro en la misma centuria de la Orden del Císter en Alaba, que sería el de Santa María de Barría del municipio de San Millán-Donemillaga, cerca de Salvatierra-Agurain en la Llanada Alabesa, y que está documentado por primera vez en 1217, por lo que podría ser el único convento femenino anterior a la conquista de la Nabarra Occidental. Este era el lugar de la Junta de la "Hermandad de Heguillaz" o de "San Myllan". 


Este convento cisterciense de monjas, pasó sobre el año 1270 a Oion, en la actual Rioja Alabesa, hoy ya desaparecido.



"El monasterio cisterciense de Barria, está situado en la falda meridional de los montes limítrofes con Oñati. Se cree que es uno de los primeros monasterios fundados por el císter. Su antigüedad queda constatada por una bula del Papa Gregorio IX en 1232 que conserva la Orden"https://www.euskadi.eus/web01-a2elikal/es/contenidos/informacion/ibilbidea_3/es_ibilbide/herria_4.html.

Convento de Barria en San Millán, foto de arriba, y lugar donde estaba el convento de Oion, foto de abajo.
Cubierta de sarcófago de estilo románico de forma trapezoidal labrada en relieve con motivos geométricos y vegetales inscritas en círculos, unidos secuencialmente entre sí. Procede del monasterio de Barria que data de finales del siglo XII o primeros años del siglo XIII siendo una de las primeras fundaciones de la orden del Cister en el País Vasco, dependiente del Monasterio de las Huelgas, Burgos.

Cubierta de sarcófago de estilo románico de forma trapezoidal ricamente labrada en relieve con motivos figurativos y vegetales. Procede del monasterio de Barria que data de finales del siglo XII o primeros años del siglo XIII siendo una de las primeras fundaciones de la orden del Cister en el País Vasco, dependiente del Monasterio de las Huelgas, Burgos.
https://apps.euskadi.eus/emsime/catalogo/objeto-lapida-sepulcral/ciuVerFicha/museo-57/ninv-AAAA/1502


En Gipuzkoa, se fundó un único convento femenino en todo el siglo XIII, que se acogió a la orden de San Agustín, fue el de San Bartolomé de la villa de San Sebastián-Donostia, al frente del cual había una priora en el año 1250.


Gipuzkoa tuvo que esperar a finales del siglo XV, por tanto dos siglos y medio, para ver fundado su segundo convento de monjas, las franciscanas de la villa de Azpeitia (1497). 


Las clarisas de Orduña. Es la primera noticia de una comunidad religiosa en la Bizkaia actual, se trataba de clarisas o al menos una batería vinculada a la Regla franciscana y data de 1296.
La ermita de Santa Marina extra muros y cercana al castillo, aparece documentada entre 1270 y 1275. La ciudad cedió el sitio a los padres franciscanos en 1469 para edificar allí su convento, cuando éstos de trasladaron  tomaros su lugar las monjas clarisas.
Santa Marina es una Santa gallega asociada habitualmente al Camino de Santiago.
En el año 1597 los franciscanos se trasladaron al convento que ocuparon hasta la exclaustración, cerca del castillo también extramuros


En la entonces villa de Orduña, se fundó un convento en el siglo XIII: “filiarum sororum vivetium sub habitu Monialium et secundum instituta Ordinis Sanctae in Ecclesia Sanctae Mariae veteris de Urdunia”. 

Es primer convento de la Bizkaia actual, aunque en esa época, la villa de Orduña ("ciudad" desde el siglo XV), no estaba dentro del condado y después señorío de Bizkaia.


SIGLO XIV

Por tanto, en Bizkaia, la creación de los conventos o monasterios fue incluso más tardía que en los otros territorios. El convento más antiguo cierto es del año 1357, se trata del convento de San Francisco  de Bermeo, cabeza de Bizkaia y principal puerto de todo el Cantábrico. Se fundó por orden de la señora de Bizkaia Doña Juana de Lara y su marido Don Tello de Trastámara (hijo bastardo del rey de Castilla). 

Bermeo tuvo otro convento de franciscanos de la observancia en la isla de Izaro, pero solo duró un lustro, entre 1422-1427, siendo su primer superior un Arteaga, entonces poseedores de la torre que en ese mismo siglo pasó a los Ertzilla, familia de ricos ferrones llegada, probablemente, desde Gipuzkoa.

San Francisco de Bermeo


En 1368 se fundó el primer convento femenino de la Bizkaia nuclear, el dominico de la villa marinera de Lekeitio. 

Por las mismas fechas que el de Lekeitio, se fundó el de San Juan de Quejana en el valle y señorío de Ayala bajo el patronato de sus poderosos condes, que entonces no pertenecía a Alaba.


La colegiata de Ziortza-Zenarrutza, en el municipio de Zenarruza-Bolibar (cerca de Markina-Xemein), es un monasterio, convento o casa con monjes o religiosos. Fue creado por el obispo de Calahorra en 1379 sobre dos iglesias anteriores y dos necrópolis que existieron en el lugar, con restos arqueológicos de los siglos IX-X y XII, según los arqueólogos de la Diputación, por tanto, es uno de los primeros de Bizkaia. 

La colegiata de Ziortza es un punto estratégico del Camino de Santiago por la costa. Hasta el siglo X, el principal lugar de peregrinaje fue Roma, donde se veneraba la tumba de San Pedro, pero en los siglos XI y XII, la Ciudad Eterna fue eclipsada por el Sepulcro de Cristo en Jerusalén y por la tumba del apóstol Santiago en Galicia.



Poco más hay que contar sobre conventos en la Nabarra Occidental en el siglo XIV, salvo las monjas sanjuanistas del siglo XIV de Salinas de Añana como vamos a ver. 

En su trabajo “Iglesia, religiosidad y sociedad en el País Vasco durante el siglo XIV” (2007), el doctor en historia y especialista en el medievo vasco, Ernesto García Fernández, comentaba que: 


"No sólo la nobleza se benefició de este modelo de relaciones socio-religiosas –entre los que hay que incluir de manera particular a los señores de Vizcaya–, sino también los concejos de algunas villas vascas, que dispusieron del patronato pleno o compartido con los clérigos beneficiados de sus respectivas parroquias, algunos conventos (San Francisco de Bermeo -en Bizkaia- y San Juan Bautista de Quejana -en Ayala-), monasterios (San Millán de la Cogolla -en La Rioja-), iglesias colegiales (Santa María de Cenarruza -en Bizkaia-) y la propia monarquía castellana que disfrutaron de prerrogativas similares sobre numerosos monasterios e iglesias parroquiales del País Vasco".


Conjunto monumental de Quejana o Kexaa, fundado por Fernán Pérez de Ayala en el siglo XIV, incluido el convento de monjas.
Para más información sobre los Ayala
https://lehoinabarra.blogspot.com/2020/05/las-tenencias-nabarras-de-llodio-y-ayala.html


Por tanto, es interesante documentar la tardía penetración en toda la Nabarra Occidental de los monasterios de monjas y aún más los masculinos de monjes o religiosos, más si lo comparamos con otros lugares cercanos, donde, para los siglos X-XI, la presencia es más que notable: Oña en Burgos (masculino y femenino), San Juan de la Peña (Aragón), San Millán de la Cogolla (La Rioja)  o Leire-Iratxe-Irantzu en Alta Nabarra por citar algunos de los más importantes. 


Es más, las primeras fundaciones se limitan a las villas, por influencia de los señores de Bizkaia o los reyes de Castilla o incluso los condes de Ayala, fuera de la Tierra Llana, lo que parece evidenciar la fuerza que la principales familias banderizas ejercía contra su implantación, más si vemos el conjunto de todo lo relacionados con el patronazgo laico de casi todas las iglesias y ermitas de esos siglos.


Por tanto y resumiendo, parece que el poder de los señores de Bizkaia desde época del reino de Nabarra, así como los intereses de los Pariente Mayores o Cabos de Armería en lenguaje del reino baskón, que poseían casi todos los patronazgos de las iglesias de la Nabarra Occidental, también afectó al asentamiento de monjes y monjas, siervos de la Iglesia Católica, cuyo poder estuvo muy limitado en estas tierras.


Para saber más sobre esta cuestión de los patronazgos laicos de caballeros y damas, se puede leer: https://lehoinabarra.blogspot.com/2021/03/las-inmatriculaciones-y-la-propiedad-de.html



LOS MONJES SOLDADO EN LA NABARRA OCCIDENTAL




En el siglo XII se crearon las órdenes militares, las cuales se consideraron una fuerza regular y entrenada para la defensa de Tierra Santa. La capacidad de reclutar miembros continuamente desde Europa, les dio unos recursos que los nobles y reyes no pudieron igualar. Sus fuerzas estaban equipadas de manera similar a los ejércitos de la época, en cuanto a caballos, cotas, armas etc., lo que daba mayor consistencia a sus unidades. 

Pero, en toda la Nabarra Occidental, no existieron los "monjes-soldado", ya sean Templarios o de otras Órdenes militares al servicio de sus Maestres y del papa de Roma. Es cierto, que para el siglo XI, estas comarcas nabarras no tenían frontera con los musulmanes, pero puede que no fuese la única causa.

En el caso la Orden del Hospital de San Juan Jerusalén (san juanistas), conocida también como de Rodas o Malta, su presencia en la Nabarra Occidental es testimonial, siendo quizás tan solo  de esta Orden la ermita de San Juan de Arramel de Tolosa, anterior probablemente a la conquista castellana, ya que está documentada en el año 1205.


Capilla de San Juan de Arramele de Tolosa, totalmente reformada


Señala Ernesto García Fernández como: “En el siglo XIV, se registra el convento femenino de San Juan de Acre en Salinas de Añana (Alaba), perteneciente a la orden de San Juan de Jerusalén. Es posible que desde esas fechas las iglesias de Santa Catalina de San Sebastián (extramuros sobre el río Urumea, iglesia documentada sin embargo en el siglo XV) y de San Juan de Arramel de Tolosa fueran encomiendas de la misma orden, pues a mediados del siglo XV, Juan de Beaumont, prior de San Juan de Jerusalén en el reino de Navarra, cesó al comendador de dichos centros y designó otro nuevo (…)”. 

Es más, hasta el siglo XIV no se instaló en Alaba la sección femenina de la Orden de San Juan de Jerusalén, para la ayuda a los caminantes en la vías de peregrinación, y el priorato en de Iruña de Oka del mismo siglo en la antigua Calzada Romana Burdeos-Astorga y Camino de Santiago baionés o vasco, monasterio este último que desapareció en el siglo XVIII. Pero, esta Orden nos aporta una curiosidad.

Convento femenino de San Juan de Acre en Salinas de Añana

"(...) la acción de las ordenes militares y en especial la del Hospital de San Juan de Jerusalén, añade otro elemento a favor del protagonismo navarro en muchas de las fundaciones consideradas plenamente castellanas. En Salvatierra, Tolosa y San Sebastián, por ejemplo, se sabe de la existencia de encomiendas del Gran Priorato de Navarra de esa orden militar en las inmediaciones de la puebla; parece que su implantación está relacionada con la protección de los caminos, controlando puentes en pasos estratégicos u ofreciendo otros servicios".

Convento femenino de San Juan de Acre en Salinas de Añana

Por tanto, en el caso alabés y gipuzkoano, pese a la conquista castellana, estas Órdenes seguían dependiendo de sus superiores en la Nabarra como antes de la conquista, pero no pudieron prosperar, seguramente por la oposición de los Parientes Mayores. 

En Bizkaia, simplemente, no existieron ninguna de estas Órdenes religioso-militares y, los que se creían que lo eran, no lo son, según escribió E. Labayru en "Historia general del señorío de Bizcaya":

“Respecto a la iglesia de Galdácano y Gastel-Ugach se las atribuyó el carácter templario, tan sólo porque era achaque común el atribuir a los caballeros del temple todos los edificios cuyo origen no se sabía apreciar por los naturales del pueblo en que se hallaban estas fábricas. La equivocación sobre Berriz y San Agustín de Echebarría procede de unos papeles del siglo XVI que no tienen mérito alguno, y en cambio están plagados de simplezas”.


Para más información sobre el origen de estas Órdenes religiosas y su presencia en la Nabarra Occidental se puede leer el el artículo: https://lehoinabarra.blogspot.com/2020/03/hay-cruces-de-malta-en-andra-mari-de.html