EL EUSKERA EN EL DUCADO DE BASKONIA (GASCUÑA-BEÁRN)


EL EUSKERA EN EL DUCADO DE BASKONIA (GASCUÑA-BEÁRN)

Aitzol Altuna Enzunza




El sonido del euskara no resulta extraño a los Pirineos, a nuestro Auñamendi (al pie la montaña), ni al Norte ni al Sur de la cadena montañesa que nunca fue obstáculo sino refugio del euskara, nexo vertebrador entre la Baskonia aquitana y la ibérica, como las bautizó el historiador suletino y parlamentario de la Nabarra libre Arnauld de Oihenart en el s. XVII. Sólo hay que pasar siglos y guerras hacia atrás para que la primera lengua europea resuene con su inconfundible sonido en las montañas, en los valles o los pueblos de Pirineo, pero también en la Ribera de los grandes ríos de Baskonia, la única voz no indoeuropea en el occidente continental.




Los celtas fueros los primeros en hacer retroceder al euskara, sobre todo al Norte, entre los ríos Loira y Garona, después los romanos crearon numerosas ciudades en la rica Novempopulania o Aquitania donde quedaron enclavados los “ausko” con su plural latino “auski”, el cual nos da el gentilicio aquitano (auski+tano). Ciudades construidas a imagen de Roma y donde se hablaría latín en alguno de sus dialectos. 



Pero las ciudades de Novempopulania o Aquitania III eran bilingües (o trilingües), pero el campo seguía siendo baskón, euskaldun monolingüe. El poeta bordelés Ausonio en sus cartas con San Paulino en el siglo IV, trata de salvajes y paganos a los baskones de los bosques pirenaicos. San Paulino en una carta a Ausonio decía: “Si alguien, sin mácula de debilidad, gasta su vida en un bosque baskón, su carácter inmaculado como antes, no se ha infectado de la barbarie de sus huéspedes”.


Pero no es hasta la caída del Imperio Romano Occidental cuando los francos terminen de generalizar el término “waskones”, pues los ven como un único Pueblo y no hay posibles interpretaciones en otro sentido: son todos baskones por la lengua que hablaban, el euskara. Así, el historiador franco Gregorio Tours en el 587 hablaba de "Wasconia" con "w", ya que en latín la palabra “baskones” se pronuncia [uuáskones]. Los escritores griegos o helenizados escribían "ouascones", los musulmanes desde el siglo VIII escribirán por primera vez con "b".

Atarratzeko Aranheko Maria Madalenaren ermitan aurkitzen den Herauscorritseheri eskainiriko erromatar aldare-harria. 1986 https://eu.m.wikipedia.org/wiki/Herauscorritseren_idazkuna

Lápida de Hasparne

Tal y como señalaba B. Estornés Lasa en la Enciclopedia Auñamendi, en euskera: “la v. Esta última no existe en vasco y es difícil probar que haya existido nunca”. El área anti-v, en mayor o menor grado, cubre toda la zona de prehistoria originariamente protovasca: Gascuña, Vasconia, Pirineo catalano-aragonés, Languedoc y Castilla la Vieja. En cambio, la u vasca, colocada entre vocales, o precediendo a la vocal a, en ua, ya no es una pura u sino que tiene algo de consonante al estilo de la w inglesa. Este sonido vasco es el que luego ha debido pasar a v, como en Nauarra y Navarra, uasco y vasco (…) En conclusión podemos deducir que la tendencia a escribir con v- es propia de los latinos, la tendencia a escribir con w es de los germanos, y la tendencia a escribir con b es de los iberos, árabes y vascos romanizados”. 




El nombre “baskón” no existe en euskera donde la forma empleada sería “euskaldun” (eusko+era+dun).

(Nabarlur, Eneko del Castillo)

Tras la caída del Imperio Romano, se creó el ducado de Baskonia por la resistencia de un Pueblo que ya ejercía como una unidad política en todo su territorio mediante su familia ducal contra el intento de domino de visigodos, francos o musulmanes. Sus estructuras políticas soberanas o Estados, fueron llamados Baskonia primero y Nabarra después (s. VI-XVI).




Pasaron varios siglos en los cuales el ducado de Aquitania (Garona-Loira) en manos de los francos se disputaba el ducado de Baskonia a Nabarra (la parte continental https://lehoinabarra.blogspot.com/2019/03/baskones-contra-francos.html). En el año 1033 los duques de Baskonia y los reyes de Pamplona-Nabarra estaban emparentados como se estuvieron desde sus inicios, hasta tal punto que el duque de Baskonia Sancho Guillermo vivía en la corte de su sobrino Sancho III el Mayor, al que dio el vizcondado de Lapurdi primero y le hizo duque de Baskonia a su muerte. Pero el duque Guillermo de Aquitania, vasallo del rey francés, y que estaba casado con la hermana de Sancho Guillermo, aprovechó la muerte de Sancho III el Mayor para invadir el ducado de Baskonia para su hijo Eudes o Eudón, aunque la resistencia fue importante y la ocupación no fue definitiva hasta 1063.

(Diócesis de Lapurdi-Vizcondado de Lapurdi originario. 
Nabarlur. Eneko del Castillo)


Sancho Guillermos creó para Sancho III el Mayor el vizcondado de Lapurdi, mucho más extenso que en la actualidad, con territorios de Baja Nabarra y Oarso en la actual Gipuzkoa hasta el valle de Hernani. Lapurdi estaba separado del ducado de Baskonia por el río Atturri (Adour) que desemboca en Baiona, el cual quedó como la nueva frontera. Recordemos que en el año 1130 el rey de Nabarra Alfonso I “el Batallador” expulsó de Baiona al conde de Aquitania y Tolouse Guillermo X “el Teólogo”, el cual se había encerrado en ella para seguir con su expansionismo, para ello contó con escuadras bizkaínas, gipuzkoanas y labortanas, algunas construidas exprofeso sobre el mismo río Adour. Baiona volvió a Gastón de Beárn, conde de Baskonia y Lapurdi, vasallo del rey nabarro. Baiona era en esa época el principal puerto nabarro y de todo el Cantábrico y donde Alfonso I en su testamento dice que empieza el reino de Nabarra bajo su cetro.


Baiona sucumbió definitivamente a las tropas aquitanas. En el año 1193, el vizconde nabarro de Lapurdi Guillermo Raimundo de Sault o Zaldua (1192-1197) cedió sus derechos al conde de Aquitania Ricardo “Corazón de León” que había recibido el ducado de su madre Leonor de Aquitania. El último vizconde de Lapurdi fue sustituido por un funcionario llamado “baile, bayle, balio” aquitano, equivalente a las figuras coloniales de corregidor en la Nabarra Occidental y al virrey de (Alta) Nabarra, perviviendo los Fueros o el derecho pirenaico.



Aun así, Lapurdi y Zuberoa mantuvieron un doble vasallaje al reino baskón (https://lehoinabarra.blogspot.com/search/label/TENENECIA%20DE%20ZUBEROA). Ricardo heredó de su padre Enrique II de Plantagenet la corona inglesa y se casó con la princesa nabarra Berenguela para pacificar el territorio de la Baskonia continental, pero la prematura muerte de Ricardo sin descendencia frustró el acuerdo (https://lehoinabarra.blogspot.com/search/label/TENENCIA%20DE%20LAPURDI). El retablo de Aralar habría sido un presente de boda del aquitano a Berenguela. Entre los 1193 y 1234 se creó Baja Nabarra, tierras que se mantuvieron en la corona de Nabarra hasta el final de su soberanía (https://lehoinabarra.blogspot.com/search/label/TENENCIA%20DE%20BAXE%20NAFARROA).

Estatua de Gastón III Febo en Pau (Bearne).
El conde Roger Benardo de Foix entre 1278-1302 (además vizconde de Cerdaña y Castellbó), fue el que creó el condominio o coprincipado de Andorra junto con el obispo de la Seu de Urgel (el Pereatje) y por tanto fue el primer copríncipe. Estuvo casado con la princesa del Bearne Margarita de Motcada (vizconcondesa además de Marsan, Oloron, Brulhes, Gabarret, Bigorra y señora de Montcada), siendo el hijo de ambos quien uniría todos los títulos y de nombre Gastón I de Foix-Bearne (1287-1315), el abuelo de Gastón III Febo (1331-1391), aliado del rey de Nabarra Carlos II de Evreux y estuvo casado con su hermana la princesa Inés de Nabarra y fue además gobernador del condado de Gascuña, territorios todos ellos entonces a caballo entre la sobernía francesa y aquitano-inglesa salvo el coprincipado de Andorra.

El norte del antiguo ducado de Baskonia dominado por Aquitania se romanzó rápidamente y será llamado Gascuña (se escribirá realmente “Wasconia” durante siglos). No es hasta el año 1453 cuando Lapurdi, Zuberoa y Gascuña quedaron en poder de Francia que arrebató el territorio poco a poco a la corona de Aquitania-Inglaterra durante la “Guerra de los 100 años”, nombre que nos da la idea de la conquista gradual que se produjo de la Baskonia continental por Francia.

(Baskonia dividida en tres Estados desde 1134. Nabarlur, Eneko del Castillo)

Durante la Guerra de los 100 años entre Inglaterra y Francia pero en territorio continental, las tropas del ejército francés de Carlos VII encabezadas por el vizconde del Beárn, Gastón de Foix, tomaron en 1449 Zuberoa y su castillo de Maule, en 1450 Lapurdi y un año después Baiona. Gastón de Foix era un vizconde independiente en su Estado del Beárn desde el siglo XIII, pero rendía vasallaje al rey francés por otras posesiones.

Municipio del Departamento del Alto Pirineo, distrito de Tarbes 

Estaba además casado el bearnés con Leonor, hija de la reina de Nabarra y de Juan de Aragón, por lo que contó con la ayuda de las tropas Nabarras en la toma del castillo de Mauleón, rendía Gascón también vasallaje a los reyes de Nabarra, siempre que no fuera en una guerra contra el rey de Francia. A la muerte de Juan de Aragón, Gastón de Foix fue el nuevo rey consorte de Nabarra.

Salies de Beárn


En el año 1479 con la llegada a la corona nabarra de los Foix, el hijo de Gastón, Francisco Febo I (1479-1483) era rey de Nabarra, vizconde de Bearne y copríncipe Andorra, Estados igualmente soberanos bajo la misma corona (del mismo modo que “Las Españas” o el imperio austrohúngaro después). Pero será vasallo del rey francés en su territorio de Foix, así como en los condados del antiguo ducado de Baskonia continental o Gascuña de Bigorra, Marsan, Gabardan y Nebouzan. Además, poseerá Castellbó en alto Urgell. En el año 1522 se añadirán a la corona nabarra los territorios de los Albret al casarse la hija de Francisco, Catalina I de Nabarra, con Juan de Albret o Labrit, los condados gascones de: Albret, Tartas y Armañac y los aquitanos de Perigord y Limoges.



Durante los años 1527-30 Los soldados nabarros de Enrique II de Albret el Sangüesino con sus aliados bearneses, gascones y franceses, liberaron Baja Nabarra que también había sido tomada Castilla-Las Españas en la conquista de 1512, para ello contaron con la ayuda de la población contraria a su integración Castilla. Tal y como el sangüesino dejó escrito, el reino de Nabarra comprendía: “Guipúzcoa, Bizcaya y Alaua (sic.) y mucha parte de Rioja hasta el olmo de Burgos (…) como las sepulturas que antiguamente los reyes de Navarra tenían en Nájera y otras ciudades y villas que hoy en día parecen las armas de Navarra, así como en Logroño y en otros lugares, que de poco acá se han borrado”.

Gouvernement de la Guienne et Gascogne (titre inscrit) 1670
Gouvernement de la Guienne et Gascogne 1651


En el año 1620 se produjo la ocupación militar de la corona Nabarra compuesta por los Estados de (Baja) Nabarra, Andorra y Bearn por las tropas del rey de Francia Luis XIII, al entrar el ejército francés en sus Cortes y Estados Generales en Pau pese a la resistencia armada de algunos nobles bearneses.

En el año 1593 los reinos de Nabarra y Francia tenían el mismo rey Enrique III de Nabarra (IV de Francia) pero su asesinato en 1610 provocó que su sucesor, Louis o Luis XIII uniera ambas coronas. 

(Nabarlur. Eneko del Castillo)


EL EUSKERA EN GASCUÑA Y EL BEÁRN

“No hay razón para dejar de admitir que en Aquitania se habló vasco hasta la Edad Media” Julio Caro Baroja (1915 Madrid- 1995 Bera) “Sobre la lengua vasca y el vasco-iberismo”.

Luis Nuñez Astrain (1939-2009 Donostia) en el libro "El Euskera arcaico” comentaba al respecto: “Esta comarca soportaba en época romana una población alta y un comercio intenso por el río Garona con Burdeos como principal puerto. El profesor Joaquín Gorrochategui ha estudiado comparativamente la densidad de nombres vascos y de nombres galos en las lápidas latinas de cada zona de Aquitania y ha llegado a la conclusión clara de que la lengua vasca era netamente dominante en la cuenca del Adur (Baiona-Dax/Akize, pueblo de los tarbelli, los más rebeldes a la conquista romana) y en las zonas altas próximas a los Pirineos -oeste y sur de Aquitania- mientras que la lengua céltica de los galos penetraba desde su territorio propio en Toulouse y orilla derecha del Garona hacia la orilla izquierda -norte y este de Aquitania-, desvasquizándola”.

El historiador ronkalés Estornés Lasa (Isaba 1907-Donostia 1999) explicaba que existen en las estelas funerarias numerosas palabras en euskera entre los “ausko” de lo que era la provincia romana de Aquitania. En total se han encontrado en Aquitania aproximadamente unos 400 antropónimos y 70 teónimos, muchos de ellos en euskera en todo o en parte. Se calcula que sólo el 25% aproximadamente del euskera inscrito en los mismos se entiende a través del euskera actual, por lo que es muy probable que estemos descartando palabras que sí son euskera por ser términos ya perdidos. Los sitios de aparición de estos nombres son: Baudéan (Hautes-Pyrénées y Haute-Garonne), Saint-Aventin Saint-Bertrand-de- Comminges, monte Gar, Luchon, Cadéac, Ardiège, Saint-Gaudens, Loudenvielle, Cardeilhac, Saint-Pée-d'Ardet, St.-Béat, Gourdan etc.

Tal y como recoge B. Estornés Lasa (1907 Isaba – Donostia 1999) en sus libros sobre los “Orígenes de los vascos”, un resumen de esas primeras palabras escritas en euskera sería: “Aher Ama Amoena Andere Arix Arte Asto Atta Bai Begi Bele Bels Berri Bihox Bihox Buru Erdi Erri Garr Gison Har Gorri Idi Ili Illun Ilur Itur Ituri Lapur Larra Larra Lehen Lur Neska Sembe Osto Lex Oia Ocho Vasco Viriatu etc. De estas palabras coinciden con el euskera actual sus propios sufijos y la sintaxis de composición cuando se trata de nombres compuestos o de nombre y adjetivo como enhar belz”.



La presencia del euskera en toda Baskonia mientras ésta fue libre es un hecho innegable (s. VI-IX). Es más, la desaparición del euskera de Gascuña incluida el Beárn se precipitó durante del Guerra de los 100 años, quedando reducidos sus hablantes al Pirineo. En el caso de los vizcondados de Lapurdi y de Zuberoa, su independencia administrativa de Aquitania primero y de Francia después, permitió que el euskera apenas retrocedieses salvo en Baiona-Anglet donde competirá con el gascón, con dos burgos, el euskaldun y el gascón como en la actualidad. La situación es mejor en Baja Nabarra, situada entre ambas y libre de la presión imperialista al seguir dentro del reino de Nabarra.

La Enciclopedia Auñamendi señala que cuando el “Ducado de Vasconia pierde la lengua aborigen quedando fragmentado lingüísticamente en tres zonas, la de habla propia y las romanizadas gascón y navarro-aragonés de la Ribera navarra, Alto Aragón y Rioja, que permanecieron largo tiempo bilingües. La supervivencia de nombres euskéricos en la mitología gascona y, sobre todo, la densa toponimia vasca en territorio gascón actual estudiada por Corominas, el nombre Vasconia = Gascuña y, sobre todo, su historia medieval, dejan ver a las claras que el actual país de habla vasca es un territorio residual de esa Euskalerria medieval”.



El idioma gascón y su dialecto bearnés, son fruto de la sobre posición del latín y del euskara, idioma éste del que derivarían el 20% de las palabras en gascón. Como algunos de ellos señalan con orgullo hoy, los gascones serían “vascos romanzados”. Estos dos idiomas se diferencian claramente de los idiomas occitanos, pese al intento de éstos de integrarlos como un dialecto de la “lengua de Oc” o idiomas “occitanos”.


Según la Enciclopedia Auñamendi, Gerhard Rohlfs (Le Gascon, Pau, 1970) “ha estudiado detenidamente el gascón, dice que no nos hallamos ante uno de los dialectos del dominio provenzal, sino ante un idioma que por sus peculiaridades se aproxima a lo que consideramos como lengua independiente. Una opinión parecida sostenía ya Luchaire, verdadero fundador de la filología gascona, cuando dice que por su situación sobre el territorio de una vieja lengua iberoeuskariana -la de los antiguos aquitanos-, el gascón tiene un lugar aparte en el conjunto de dialectos de la lengua de Oc y que merece ciertamente una atención particular de los romanistas”.

Del mismo modo se expresa el provenzalista alemán Carl Appel: "Si en alguna parte hay una frontera absoluta entre los dialectos de Francia, es en la frontera del Garona, que separa los dialectos bearneses y gascones de los de Languedoc. Es pura convención separar del complejo occitano la lengua del Roussillon, pero no el gascón".



En la Aquitania medieval, la cual no era un Estado independiente sino un apéndice de la corona franco-francesa, el euskera fue barrido por los idiomas romances salvo en el Pirineo central. El caso del Beárn, que sí era un Estado independiente y al cual podemos considerar el último reducto del ducado de Baskonia en la parte continental, el euskera también se limitaba desde su creación en el siglo XIII a extensas comarcas del Pirineo, pero su situación era algo mejor al ser aceptado por la administración bearnesa, por lo que sobrevivirá junto al bearnés hasta el presente. 



Clemente V, papa de Avignon, su verdadero nombre era Bertrand de Got (Villandraut 1264- Roquemaure 1314). La imagen proviene del Pontificum Romanorum Effigies, donde aparece como "vasco" y de "Vasconia", se trata de un cultismo al haber nacido en Baskonia, entonces Gascuña, no muy lejos de Burdeos (45 Km en línea recta) y cerca del río Garona en la Gironda de Aquitania.

El euskera era de uso común en el siglo XIII-XIV en Bigorra (Gascuña), al Este del Beárn y en la Euskal Herria continental actual. En el registro de impuestos del valle Uhaitz (Ühaitza) en Beárn del año 1385 (cercano a Zuberoa), los nombres de muchas casas están en gascón y en euskara, lo que demuestra el uso de ambos idiomas.




Juan Iñiguez de Ibargüen de la merindad de Zornotza sobre el año 1588 escribió su “Crónica General Española y Sumaria de la Casa de Vizcaya, y su antigua fundación y Nobleza”. Se cree Ibargüen fue el escribiente del santanderino García Fernández de Cachopín, por lo que su crónica sobre Bizkaia es llamada de Ibargüen-Cachopín. La crónica es poco rigurosa en cuanto al pasado de Bizkaia - como tantas otras de la época-, pero sí que aporta el testimonio directo de dos personas sobre hechos de los que son testigo, además de una importante recopilación de folclore, dichos, refranes (como el canto de “lelo”) o de leyendas. El autor nos da también información sobre el euskera que se hablaba en cada municipio bizkaíno, e incluso los lugares en el que aún se hablaba a finales del siglo XVI:

“(...) este bascuençe antiguo se habla perfectamente como de primero en su principio en la probinçia que agora es llamada Viscaya, y lo mejor y más claro de ello y más elegante y pulido en la tierra que está entre Vermeo y Durango. El cual lenguaje bascongado muy çerrado y con otros munchos açentos y sonidos diferentes lo usan y hablan tanbién en las probinçias de Guipúscoa, Nabarra, Álaba y Gascuña y comarcas çercanas, y los unos muy más çerrado que los otros”.

“(…) Y esto pasó tan adelante que oy día a cualquiera bascongado mediante este abuso todos en general les llaman proprios vizcaínos, siendo, como son, fuera destos originarios de Vizcaya, otros munchos bascongados, llamados guipuscoanos, bascones, nabarros, alabezes y otros que hablan bascuençe, aunque corruto, que no cuento por pasar de largo en cosas que me parece lo debo hazer”.



Vizconde bearnés s. XIII (Baleares)



Aunque la frontera idiomática entre el euskera y el gascón se supone que es Baiona, en 1679 el Marques d´Aulroy en su libro “Relation du voyage d´Espagne” comenta que las mujeres de Baiona saben francés pero que de común sólo hablan euskera. Pero en 1729 el peregrino de la Ruta Xacobea Guillourme de Marier se tiene que hacer entender en Baiona por señas al no encontrar quien sepa francés, que parece lo conocía sólo las clases más altas: “Fuimos a Baiona, la capital de Bizkaia (sic.) o de los “Basque” (…) nuestra principal dificultad fue la desaparición del francés, y no por el español sino sólo se oía bizkaíno, más difícil de habla que el alemán”. En esos siglos “bizkaíno” era sinónimo de euskaldun.




Jean-Louis Davant en su libro "Baskoniako notizial Iparretik ikusiak": "(Sin embargo, según los expertos, el gasconés tiene una influencia del euskera. Gascuña se expandirá reduciendo la superficie del euskera y con el tiempo se acercará a las fronteras vascas actuales (...). 

En Gascuña, nuestra lengua solía abarcar un área más amplia que ahora. En la Edad Media parece haber perdurado durante mucho tiempo en la región de Chalosse en las Landas, cerca de Akize (...).

Se repiten algunas cosas, pero sin pruebas: que la mayor parte de Bearno cambió de lengua en el siglo X, que el euskera se perdió en los altos valles de Aspe y Ossau en el siglo XII, que la actual frontera del euskera desde el noreste se estableció en la Edad Media... Si hay otros indicios: por ejemplo, que las dos lenguas coexistieron en el fondo del valle de Ühaitz en el siglo XIV, quizás en el valle de Barétous en el siglo XV, y en la vertiente del Bidaxune en el siglo XVIII. en el resto del siglo...(...)

En el cercano Bearno, en el valle de Ühaitz, hasta Salbaterre, las casas tenían dos nombres: uno en euskera y otro en bearnés, como encontró el profesor de euskera Txomin Peillen en el Censier o antiguo libro de impuestos de Bearno, y el fallecido médico Constantin dice que en el valle del Baretous se hablaba euskera en el siglo XV".


En el Beárn se habló euskara hasta los siglos XVI-XVII y en muchos pueblos hasta el siglo XVII. En el libro mencionado Luis Nuñez Astrain (2003), comentaba que en el Beárn también se habla de forma extensa el euskara junto al romance bearnés hasta el siglo XV cuando menos. En las comarcas gasconas de Bidaxune y Gixune se sabe que perdura el euskara cuando menos a finales del siglo XVIII.

La Revolución Francesa de 1789 hizo que todo cambiara. Se creó el departamento de Basses Pyrénées que además de la Baja Nabarra y el Bearne incluía las comarcas de Lapurdi y Zuberoa. Xabier Irujo e Iñigo Urrutia (Historia jurídica de la lengua, 1789-2009, IVAPEHU, 2014) concluyen que del estudio de Grégoire (1794) se desprende que solo el 11% de la población hablaba francés en su día a día. Además se hablaba únicamente en 15 de los 83 departamentos ("Asedio al euskera" Joan Mari Torrealdai -2018-). Pero había un porcentaje alto que lo dominaba como idioma administrativo, sobre todo los funcionarios.

Torre Moncade de Orthez


Al principio se dividió en tres distritos vasconabarros (Uztaritze, Donapaleu y Maule) y tres bearneses (Pau, Oloron y Orthez), pero la eliminación del distrito de Donapaleu en 1800 supuso la desaparición definitiva de la Baja Nabarra como entidad jurídica en Francia. En el mapa de L.L. Bonaparte de 1863 podemos comprobar como son solo dos distritos (Baiona y Maule) los que abarcan a la población vasconabarra, la cual es notable también en muchas poblaciones bearnesas como Eskiula y los colindantes valles de Josbaig y Baretos.



1810-12 de Eugene Coquebert de Montbret (París 1755- Egipto 1831) funcionario francés, hizo un estudio estadístico sobre los idiomas de todo el imperio francés y realizó los primeros mapas lingüísticos de la Euskal Herria, las mugas del euskera eran según este trabajo de campo: “En dedans/ ochagavia en navarre/ iriberri/ aoiz/ sarauen/ larraona/salvatierra/ la puebla (de Labarca? de Argazón?)/ Orduna/ Salcedo (cerca de Miranda de Ebro). Tout Ie guipuscoa est Basque”.

Por el norte: “Martori (Lestelle Saint-Martory, departamento Alto Garona, Saint-Gaudens). Ce village parle Indifferemment Basque et Bearnais, mais appartient au district Basque (De Candolle - 1807), Dep t des basses Pyrenees. on parle basque dans la commune d'Esquiule qui appartenait au beam et qui fait partie de l'arrond t d'Oloron” (…) “on croit que la Bastide de Clairence (La Bastida, Baja Nabarra) a ete formee par une colonie venue de Bigorre et que c'est par cene raison que Ie gascon y est la langue dominante. Le basque n'est entendu que par un petit nombre d'hab' de cette commune qui est cependane fort avancee dans Ie pays Basque dans bp de communes de langue francaise une partie des hab' entend Ie Basque”.

Y añadió: “la langue basque ou escuare qui se parle sur Ie territoire français dans les arrondissements de Bayonne et de Mauleon et sur Ie territoire espagnol dans Ie Guipuscoa, l'Alava, une partie de la Biscaye, de la Navarre et des montagnes de Santander”.

EL EUSKERA HOY EN EL BEARN


Aún hoy se habla euskara en el pueblo bearnés de Eskiula, donde por una de sus casas pasa la “muga” entre el Beárn y Zuberoa, además de en los pequeños núcleos de población de Aramitz, Inhaze, Arkantze y sobre todo Jeruntze. En Zuberoa la influencia de gascón-bearnés es también medieval sin desplazar al euskara, pero el francés no se impone desde Paris de manera absoluta hasta las dos Guerras Mundiales (1918-1939), cuando empieza a generarse un sentimiento nacional francés entre los euskaldunes, el cual no existía hasta entonces (https://lehoinabarra.blogspot.com/2014/07/la-persecucion-sistematica-del-euskera.html).