LAS VARIEDADES DIALECTALES DEL EUSKERA
Aitzol Altuna Enzunza
"No existe ninguna lengua que tenga una homogeneidad total en cuanto a las formas en que se utiliza una lengua. Cuanto más amplia es la zona geográfica en la que se utiliza una lengua, más variedades locales existen (dialectos).
Todo el mundo habla una variedad de ese idioma. Llamamos lenguaje a lo que estas variedades tienen en común (...)" ("La dignidad e igualdad de las lenguas" Juan Carlos Moreno Cabrera, Catedrático de Lingüística español).
"Ceren aunitz moldez eta differentequi minçatcen baitdira euscal herrian: Naffarroa garayan, Naffarroa beherean, Çuberoan, Lapurdia, Bizçayan, Guipuzcoa, Alaba-herrian, eta bertçe aunitz leccutan" (Axular “Gero” 1643).
(Porque de muchas maneras y diferentes se habla en Euskal Herria: en Alta Nabarra, en Baja Nabarra, en Zuberoa, en Lapurdi, en Bizkaia, en las tierras de Alaba y en otros muchos lugares).
LA PRIMERA CLASIFICACIÓN DE LOS DIALECTOS
La primera mención y clasificación de los dialectos del euskera se la debemos a Arnaut Oihenart en su libro Notitia Utriusque Vasconiae del año 1656 (Maule 1592-Donapaleu 1668), historiador suletino, síndico de Zuberoa y senescal vitalicio con derecho a sucesión en la Nabarra libre en Donapaleu-Saint Palais donde impartía justicia en euskera.
Toda la explicación sobre los nombres dados por los romanos a los pueblos euskaros la damos en: LEHOINABARRA: LOS NOMBRES DE LOS PUEBLOS PRERROMANOS DE BASKONIA Y SU IDIOMA |
La distribución que hace el zuberotarra de los mismos, está relacionada con cuatro de los pueblos euskaros prerromanos:
- Akitanos: palabra compuesta por ausko más el plural latino -i y el gentilicio -ano. Entre los Pirineos y el río Garona, actuales Tierra de Vascos (Iparralde) y Gascuña.
- Baskones: con la misma raíz -a(u)sko como el anterior. Al sur del Pirineo se distribuirían por casi toda Alta Nabarra, la Gipuzkoa oriental y al menos una parte de Alaba.
- Bardulos o barduli: “Bar” sería frontera y “uli” ciudad o población en euskera según señala J. Caro Baroja en su libro “Sobre historia y etnografía vasca”. Aunque su territorio estaba entre los ríos Deba y el Urumea, en este caso, Oihenart lo ampliaba hasta el Ibaizabal-Nervión por el Oeste, donde se supone vivían los karistios o karietas.
- Autrigones: no hay una respuesta satisfactoria, pero en griego antiguo significa "extraños", que es el idioma en el que está escrito por los geógrafos grecorromanos como Ptolomeo; algo muy parecido a lo que ocurre con palabra "celta" que significa "gente oculta". Vivirían entre la desembocadura del Ibaizabal-Nervión y el río Asón.
Estas son las fronteras generalmente admitidas por los historiadores, aunque los romanos no fueron tan precisos, ni muchos menos. Todos estos nombres son exónimos, es decir, nombres dados a un lugar en una lengua foránea y, generalmente, por escritores, historiadores o geólogos que escribían de esos territorios y de sus gentes por referencias.
Oihenart no se extendió mucho a la hora de explicar esta clasificación, simplemente mencionó como diferencias entre los dialectos la vocal ü usada en Zuberoa y parte de Baja Nabarra, la contraposición entre el "nihaur" de los dialectos del Oeste frente al "neuror" de los del Este, así como el uso en los dialectos del Oeste del demostrativo "(h)a" frente a "hura" del resto.
LA SEGUNDA CLASIFICACIÓN DE LOS DIALECTOS
Un segundo intento de clasificar los dialectos del euskera vino del jesuita Manuel Larramendi (Andoain 1690- Azpeitia 1766) en su libro de gramática publicado en 1729 y titulado "El Imposible vencido, Arte de la lengua vascongada".
La diferenciación se basada en la gramática, que después Larramendi extendió al vocabulario en su "Diccionario trilingüe del castellano, bascuence, latín" de 1745 y en su libro "Corografía de Guipúzcoa" de 1754.
Larramendi solo distinguía 3 dialectos:
- El que llamamos bizkaíno con todo el territorio al Oeste del río Deba.
-El gipuzkoano como dialecto central.
- El nabarro-labortano, pero con un gradiente que va desde Donostia-San Sebastián hasta el Oeste, donde nombra al zuberotarra como un subdialecto.
Esta unificación, según Larramendi (1745) siguiendo a los historiadores Esteban de Garibay (s. XVI) o a José Moret (s. XVII), se debería a la llegada de baskones del norte durante del Ducado de Baskonia (s. VI-VII).
La mayor diferencia entre los euskalkis la veía Larramendi en los verbos auxiliares como "dot, det, dut y düt" de Oeste a Este del país.
LA CLASIFICACIÓN MÁS COMPLETA DE LOS DIALECTOS
Louis Lucien Bonaparte (Inglaterra 1813- Italia 1891), el ilustre dialectólogo y príncipe francés, en una labor de investigación realizada en parte personalmente y en parte con la ayuda de colaboradores locales, dejó plasmados en un mapa que lleva fecha de 1863, los límites de la lengua vasca, baskona o euskera en cada uno de sus dialectos que tenía entonces según este estudio:
- El bizkaíno,
- El gipuzkoano,
- El labortano,
- El suletino o zuberotarra con la comarca de
Eskuila en el Beárn.
- El alto-nabarro meridional,
- El alto-nabarro septentrional,
- Bajo-nabarro oriental,
- Bajo nabarro occidental.
Incluso recogió en el mapa dos grados de intensidad en el uso de la lengua.
CLASIFICACIÓN ACTUALES
Ya en el siglo XX en el año 1958, el filólogo gipuzkoano Koldo Mitxelena (Renteria 1915-Donostia 1987), añadió a los dialectos de Bonaparte el aezkoano, el salacenco y el ronkalés y al dialecto occidental el euskera hablado en Alaba, Rioja y norte de Burgos de la Nabarra Osoa, desaparecidos entre los siglos XVI al XIX.
Los estudios más recientes como el de Koldo Zuazo “Euskalkiak, herriaren lekukoak” (2005), reducen los dialectos a tan sólo 5:
- El Occidental sobre unos 200.500 hablantes bizkaínos (mendebaldekoa): en Bizkaia, Aramaiona en Alaba y Gipuzkoa hasta el río Deba
-El central sobre unos 223.000 hablantes en Gipuzkoa y en los valles alto nabarros de Araitz, Larraun, Basaburua e Imotz (erdialdekoa).
- El alto nabarro con unos 30.000 hablantes (goi-nafarrarera).
- El bajonabarro-labortano sobre 70.000 hablantes que penetra en el noroeste de Zuberoa y en el valle alto nabarro de Luzaide (nafar-lapurtera).
-El suletino: sobre 11.000 hablantes incluida también las localidades administrativamente bearnesa cercanas a Eskiula (zuberera).
Koldo Zuazo menciona también el alto nabarro oriental: ronkalés y salacenco con 300 hablantes únicamente, de fuerte influencia del suletino, por lo que luego lo ve más como subdialecto.
Actualmente y en mi opinión, hay tan sólo tres dialectos claros del euskera o euskalkis:
1- El occidental o bizkaíno, en el cual cada vez se va introduciendo cada vez más el euskera unificado o batua sobre todo entre los jóvenes.
2- El central al Este del río Deba y que llega, con sus pequeñas diferencias, por Gipuzkoa y Alta Nabarra hasta Lapurdi y Baja Nabarra.
En este dialecto está "el segundo euskera batua" del congreso de Arantzazu de 1968 (del primer euskera batua de los siglos XVI-XVII hablamos en LEHOINABARRA: EL NACIMIENTO DE LA LITERATURA EN EUSKERA).
3- En el Este el zuberotarra o zuberera junto con el roncalés y salacenco, con muy poquitos hablantes.
Los tópicos sobre el euskera que tienen los españoles: es difícil, no sirve para todos los ámbitos o que el euskera batua es "artificial" (como si el castellano o el francés escrito y oficial no lo fuesen), lo explicamos y aclaramos en:
LA UNIFICACIÓN ACTUAL DE LOS IDIOMAS
Actualmente, en todas las lenguas del mundo incluido el euskera, se está dando un proceso de unificación mediante la escolarización total de los hablantes y las diferentes Academias de la Lengua que marcan criterios unificadores para el lenguaje escrito y oral (aunque no todas la tienen, como el inglés).
Dialectos y subdialectos actuales del castellano en España (verdes), así como el de las otras lenguas peninsulares como el euskera (naranjas), catalán (rosas), gallego (rojos), astur-leonés (morado-azules), aragonés (amarillos), occitano (burdeos), portugués (marrón), a los que hay que sumar muchos más a lo largo del mundo - Dialectos del castellano en España - Wikipedia, la enciclopedia libre - Español de América - Wikipedia, la enciclopedia libre |
También ayudan a la estandarización los medios de comunicación y las redes sociales. Mediante su labor, los dialectos se están unificando (a los que erróneamente se les llama "acentos" muchas veces), facilitando la comunicación entre sus hablantes.
Aún así, en los idiomas con más hablantes y divididos en más Estados o lenguas imperialistas (como el castellano o el inglés, extendidas por su ejército), esta unificación está lejos de conseguirse, aunque en todos ellos existe un dialecto unificado o "batua", diferente a los dialectos hablados, que sería la lengua de uso internacional.